Dos clientas del Banco de Córdoba fueron víctimas de estafas millonarias. Una de ellas sufrió la extracción de todos sus ahorros y ahora debe $1,5 millones de cuatro préstamos que la entidad bancaria autorizó a los delincuentes
La posibilidad de solicitar créditos instantáneos sin la firma del titular de una cuenta, con escasas medidas de seguridad y, en muchos casos, sin el debido control humano, ha permitido a los delincuentes concretar importantes estafas con total impunidad.
Dos clientas del Banco de Córdoba (Bancor) fueron víctimas de esta situación el 8 de abril. Sus cuentas fueron vaciadas por los delincuentes, quienes además solicitaron créditos por cientos de miles pesos, que luego también extrajeron de la cuenta de sus respectivos titulares.
Una de ellas, funcionaria judicial jubilada, denunció que le robaron $200 mil de su cuenta y que Bancor autorizó cuatro créditos por un monto total de $1,5 millón, a la vez que le dieron de baja sus plazos fijos por un monto de $600 mil. En total, la estafa ascendió a $2,3 millones.
El otro caso tuvo como víctima a otra clienta del Banco de Córdoba, quien ese mismo día sufrió la extracción de $115 mil, US$3.700 y créditos por otros $500 mil. En este caso, la mujer ingresó a través de una cuenta de Instagram del Bancor, que resultó falsa. Allí dejó datos vitales que luego fueron utilizados por los delincuentes para concretar la maniobra.
En diálogo con Comercio y Justicia, el abogado de ambas mujeres, Exequiel Vergara -especialista en derecho del consumidor-, anticipó que demandará a la entidad bancaria por no contar con las suficientes medidas de seguridad que impidan a los delincuentes concretar el delito.
Vergara advirtió de que no se trata de un cliente “distraído y que “los controles de seguridad son débiles, por eso ocurren estas cosas”.
El especialista consideró que “aquí la víctima del robo es el banco, que debe resguardar el dinero de sus clientes”. Anticipó que pedirá la nulidad de las extracciones y de los créditos solicitados por los delincuentes. Hasta el momento se desconoce a qué cuenta se transfirió el dinero que fue robado, explicó Vergara.
“El banco es el responsable de tomar las medidas de seguridad en estos créditos sin firma, no hay control humano, no hay un asesor que valide lo que se está pidiendo y, por eso, para estas personas es muy fácil la maniobra”.
Vergara asegura que estos sólo son dos ejemplos de muchos otros de personas que también fueron víctimas de los mismos delincuentes.
“Hay un bombardeo de información de este banco diciendo a la gente que ofrece créditos instantáneos pero no hay información sobre las medidas de seguridad y los controles que realiza. Además, el banco insta a la gente a que se comunique con ellos por las redes sociales y muchos terminan haciéndolo a través de estas cuentas falsas.”
El especialista en derecho del consumidor también responsabilizó a Facebook por no verificar la veracidad de sus cuentas en Instagram.
Contexto
• El aislamiento social, preventivo y obligatorio motivó un crecimiento de las estafas que se comenten través de Internet. En una reciente nota realizada por este medio, el fiscal especializado en cibercrimen, Franco Pilnik, explicó que el phishing es uno de los métodos más utilizados por delincuentes cibernéticos para estafar y obtener información confidencial de forma fraudulenta, como puede ser una contraseña o información detallada sobre tarjetas de crédito u otra información bancaria de la víctima.
• Otra de las prácticas que se sucedieron en los últimos días es la maniobra fraudulenta materializada por medio de llamados telefónicos de personas quienes simulan ser trabajadores de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) o de otros organismos públicos y engañan a sus víctimas para recolectar información personal, financiera, etcétera.
Fuente: Comercio y Justicia.
https://comercioyjusticia.info/blog/justicia/vacian-las-cuentas-bancarias-y-luego-los-endeudan-con-creditos